Saber cómo preparar las hojas de tamal correctamente es el primer paso para lograr tamales perfectos, jugosos y bien envueltos.
En esta guía completa te enseño el proceso exacto de remojo, limpieza y secado de las hojas, junto con los tiempos precisos y los errores más comunes que debes evitar. Empecemos.
Por Qué las Hojas Bien Preparadas Hacen la Diferencia
Cuando llegué a Estados Unidos hace más de 20 años, extrañaba muchísimo los tamales de México. Allá los comprábamos en cada esquina.
Pero aquí los tamales que encontraba tenían mucha masa, poco relleno y estaban secos. Fue entonces cuando decidí aprender a hacerlos yo misma.
Lo primero que descubrí fue esto: Las hojas de maíz son como el vestidito del tamal: si están muy secas, se quiebran; si están muy mojadas, la masa se resbala. Cuando las preparas correctamente, quedan flexibles, limpias y listas para abrazar tu relleno favorito sin dramas.
Además, este es el momento perfecto para revisar que no tengan manchitas de moho o estén muy maltratadas. La seguridad en la cocina siempre es primero, mi querida cocinera.
Lo Que Necesitas
- Un paquete de hojas de maíz secas. Aprende como preparar hojas de plátano para tamales aquí.
- Un recipiente grande (puede ser tu misma tamalera)
- Agua calientita
- Una ollita o molcajete para peso
- Toallas de cocina limpias
- Mucho amor y un poquito de paciencia
Como Preparar Hojas de Tamal Paso a Paso
Si aprendes mejor visualmente, puedes ver el video al final de este artículo.
1. Conoce tus Hojas
Saca las hojas del paquete con cuidado, sin jalarlas. Tócalas para ver qué tan tiesas están.
Las hojas te dicen qué necesitan. Si están muy duras, van a necesitar más tiempo de remojo; si ya se sienten algo flexibles, con menos tiempo estarán listas.
2. Separa y Revisa Una por Una
Mientras las separas, aprovecha para:
- Quitarles los cabellitos del elote que traen pegados
- Apartar las que estén muy rotas o manchadas
- Contar cuántas necesitas (no remojes todo el paquete si no lo vas a usar)
Mi tip personal: Si ves hojas con manchitas negras o verdes (moho), mejor deséchalas. No vale la pena arriesgarse.
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3. El Baño de Agua Caliente
Coloca las hojas en un recipiente grande y cúbrelas con agua lo más caliente posible. El agua caliente es el secreto para que se suavicen rápido y parejo.
Como las hojas flotan (son muy necias, como dice mi hijo), ponles algo pesado encima. Yo uso mi molcajete chiquito, pero también puedes usar una olla con agua adentro.
4. El Tiempo de Remojo Perfecto
Aquí no hay prisa:
- Mínimo 30 minutos para hojas normales
- Hasta 1 hora si están muy resecas
- Solo 20 minutitos si las compraste frescas y flexibles
¿Cómo saber si ya están? Toma una hoja y dóblala suavemente. Si se dobla sin quebrarse y se siente como tela gruesa, ¡ya está lista!
5. Escurre y Seca con Amor
Saca las hojas del agua y exprímelas suavemente. Ponlas en un colador para que sigan escurriendo.
Si tienes tiempo, déjalas ahí un ratito. Si ya quieres empezar con los tamales, sécalas una por una con toallas de cocina.
Este paso es importante: las hojas muy mojadas hacen que la masa se resbale y no se pegue bien.
6. Organiza por Tamaños
Mientras las secas, sepáralas en tres montoncitos:
- Grandes: Para tus tamales principales
- Medianas: Para parchar si se rompe alguna o para hacer tamales más chiquitos
- Chiquitas: Guárdalas para hacer las tiritas para amarrar
No tires ninguna hoja, todas tienen su uso en la cocina mexicana.
Consejos de Silvia
Sólo remoja lo que vas a usar ese día. Las hojas secas se conservan mejor en su bolsa.
Si las hojas huelen raro o a humedad, mejor compra otro paquete.
Ten paciencia con el secado. Sé que quieres empezar ya, pero las hojas bien secas son la diferencia entre tamales bonitos y tamales desbaratados.
Guarda las hojas rotas. sirven para forrar el fondo de la vaporera.
Una Nota Personal
Preparar las hojas es como el calentamiento antes del baile. Es ese momento tranquilo antes de que llegue toda la familia a ayudar con la tamaliza.
Yo aprovecho este ratito para poner mi música favorita, tomarme un cafecito, y agradecer por poder seguir compartiendo estas tradiciones con mi familia aquí en California.
Cuando mis hijos eran chiquitos, les encantaba ayudarme a secar las hojas. Ahora que ya son grandes, siguen viniendo a la cocina cuando huelen que estoy preparando tamales.
Esos son los momentos que valen oro.
¿Listos para el Siguiente Paso?
Una vez que tus hojas estén listas, ya puedes empezar con la masa y el relleno. Aquí hay varias opciones para ti.
- Aprende como hacer masa de tamales
- Receta de tamales verdes de pollo sin manteca
- Receta de tamales de puerco en salsa verde
- Receta de tamales de manzana y canela
- Acompañamientos para tamales
Y recuerda, mi querido cocinero: hacer tamales no es solo cocinar, es crear memorias. Cada tamal que envuelves lleva un pedacito de amor para los que lo van a disfrutar.
Video
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Además, cuando hagas esto, me ayudarás a compartirla con más gente en el mundo que quiere aprender técnicas de comida mexicana. Gracias.
¿Cuál es tu tamal favorito? ¿De pollo, de puerco, de rajas con queso, o dulces? Cuéntame en los comentarios, me encantaría saberlo.
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